Llevaba tiempo con ganas de hacer esta escalada. Se había ido quedando para otro día una y otra vez. Se alinearon los astros de alguna manera y tuve la suerte de poder ir con Alberto Corrales, amigo y compañero del curso de técnicos de Montaña y Escalada en Andalucía.
Un gran privilegio poder ir con él, además que la conoce bien. Hacía calor y nos faltaba un punto importante de empuje y algo de motivación, o bastante en mi caso a fin de cuentas, a pesar de aquellas ganas acumuladas. Era como si no nos sintiésemos en nuestro mejor momento.
en multitud de situaciones distintas,
fuimos progresando a buen ritmo.
Tardamos poco más de 4 horas, algo lejos de su marca en el Rally, que tardaron sólo 2 horas y media... pero vamos esa es otra historia.
Creo que habíamos compartido
tan pocas escaladas juntos que no
queríamos bajarnos y sentirnos
derrotados a pesar del calor.
Pienso que Alberto y yo sentimos la
montaña y la escalada de una
manera muy parecida.
Seguro que formaríamos un buen
equipo para hacer grandes proyectos.
Con Alberto Corrales en Zeppelin.